Sosúa – Los Embajadores de Cultura Viva en Venezuela llevaron a cabo un emocionante plan vacacional de 3 días que dejó una impresión imborrable en la comunidad. Toda la organización y preparación estuvo a cargo de estos dedicados embajadores.

Tres días antes del inicio del evento, el equipo se puso manos a la obra, limpiando y acondicionando meticulosamente el lugar para recibir a los niños. Durante este plan vacacional, se presentaron tres preceptos importantes, cada uno con una serie de actividades relacionadas.

En el primer día, se centraron en el precepto de ser “Industrioso”. Los niños vieron un inspirador video, discutieron capítulos relacionados y participaron en una serie de actividades diseñadas para fomentar la productividad y la creatividad.

El segundo día trajo una experiencia única, ya que los Embajadores establecieron una alianza con el panadero local. Los niños tuvieron la oportunidad de aprender cómo se elabora el pan, participando activamente en la creación de la masa y haciendo sus propios panes. Además, cada niño tuvo la oportunidad de plasmar sus sueños en un dibujo sobre lo que les gustaría ser cuando crezcan.

Para mantener la energía alta, el tercer día concluyó con una emocionante sesión de bailoterapia, donde los Embajadores lideraron la danza y los niños los siguieron con entusiasmo. Esta actividad no solo promovió la actividad física, sino que también fomentó la unión y la diversión.

En resumen, este plan vacacional organizado por los Embajadores de Cultura Viva en Venezuela fue una experiencia enriquecedora y divertida para todos los participantes. Demostraron un compromiso excepcional y dejaron el nombre de Cultura Viva en lo más alto. Este evento no solo fortaleció valores importantes en los niños, sino que también dejó una huella positiva en la comunidad.